En el verano de 1917, en plena guerra mundial, Frances Griffiths (Elizabeth Earl), una niña de diez años, aplaude con gran entusiasmo los vuelos de Peter Pan y Campanilla en un teatro de Londres. La magia de los personajes es tal que Frances llega incluso a olvidar el miedo que le produce la idea de perder a su padre, que está luchando en el frente.